descarga
Imagen de Miguel Andreis

Miguel Andreis

Observatorio de Gestión Pública: A la comunidad de Villa María, al Concejo Deliberante.

Ing. Guillermo Elorza – Lic. Sonia Odino – Ivan A. Billalba

En calidad de vecinos de Villa María expresamos preocupación ante noticias periodísticas que reflejan las intenciones del Abogado Martín Gill de continuar ejerciendo el cargo de Secretario de Obras Públicas de la Nación, por lo que reiteraría su pedido de extender la licencia como intendente de esta ciudad.

Somos vecinos que cumplimos con nuestros deberes cívicos y elegimos a nuestras autoridades y representantes para que sean custodios de las leyes, particularmente de nuestra Carta Orgánica Municipal, por lo que nos sentimos en derecho a reclamar todas aquellas decisiones y acciones de nuestros representantes, que consideramos están reñidas con las normas que nos rigen.

No le es suficiente al Sr. Gill abandonar el cargo de intendente para el que fue elegido, sino que presenta su candidatura como Diputado Nacional y, al obtener el cupo de votos que le permite ocupar una banca, la renuncia, demostrando, claramente, que su figura fue sólo testimonial, situación que revela una clara desvalorización de la ciudadanía que emite el voto y una actitud tramposa, violatoria de las instituciones republicanas.

Mucho se ha opinado sobre la racionalidad jurídica y política de la mentada licencia otorgada en reiteradas oportunidades, por el Concejo Deliberante, al intendente electo Martín Gill que, apenas a 15 días de su reelección, aceptó el convite para ocupar la Secretaría de Obras y Servicios Públicos en el orden nacional.

Los Artículos 124 y 125 de la Carta Orgánica Municipal –COM- considera dos situaciones: ausencia y acefalía respectivamente. Se considera que hay acefalía cuando acontece algún impedimento para ejercer la función. En este caso no hay impedimento, que conforme lo indica la palabra, es una situación de hecho que IMPIDE que el electo siga ejerciendo el cargo. La razón alegada es simplemente un acto de voluntad del intendente electo de aceptar la nominación a un cargo de gobierno cuyas responsabilidades son incompatibles con el ejercicio simultáneo del cargo para el que fue elegido.

La situación institucional de la ciudad es de considerable riesgo. El Ingeniero Pablo Rosso fue elegido como Concejal. Sin embargo, en un acto llevado a cabo en el Concejo Deliberante, la abstención del voto de algunos Concejales permitió que sea designado intendente con una minoría absoluta de votos.

Consideramos que Martín Gill HA DEJADO DE CUMPLIR CON LA OBLIGACIÓN A SU CARGO, DE EJERCER LA TITULARIDAD DEL DEPARTAMENTO EJECUTIVO MUNICIPAL, cargo que le fuera conferido por el sufragio directo del pueblo de Villa María. (Artículo 122 COM.).Solicitamos al Señor Gill de cumplimiento efectivo a su función de intendente municipal o, sin prefiere ocupar el cargo de Secretario de Obras Públicas, renunciar a la intendencia. Decimos basta al manoseo de las instituciones.

Sabemos que las abstenciones de algunos integrantes del Concejo Deliberante contribuyeron a habilitar las sucesivas licencias otorgadas, por lo tanto SOLICITAMOS QUE LOS CONCEJALES SE EXPRESEN CLARAMENTE SI ACEPTAN O NIEGAN la continuidad de la licencia del Señor Gill, fundamentando la posición tomada.

Hacemos extensiva la invitación a los ciudadanos villamarienses y a los partidos políticos de lo ciudad que así lo deseen y sientan el “sentido de pertenencia de la vida institucional-pública y lo que determina nuestra CARTA ORGANICA MUNICIPAL que rige los destinos de nuestra ciudad”, hacer acto de presencia en el Consejo Deliberante el día que se debata esta situación, donde se definirá si se transgrede una vez más a nuestra C.O.M. o bien se actúa responsablemente en aplicar legalmente lo que la misma determina con absoluta claridad.

Compartí este articulo