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Miguel Andreis

El 22 de Octubre el pueblo, soberano, elige a sus gobernantes.

“El precio de desentenderse de la política es ser gobernados por los peores hombres” J. de San Martín.

Escribe: Cristina Pablos.

El momento de la decisión es el más desamparado de la vida humana porque se llega a él en absoluta soledad. Este axioma se aplica a los seres que razonan. Hay una gran mayoría de votantes que no pasa por esta encrucijada porque otros eligen por él: les cambian el voto por un electrodoméstico.

Debemos elegir un presidente en medio del dolor social que envuelve a la sociedad toda. Sociedad que está viviendo con angustia, con cansancio, con temor e incertidumbre; solo sabe que las cosas serán peores después de las elecciones, al menos los primeros tiempos. Debemos elegir entre un gobierno en retirada (espero) que está hipotecando el futuro de todos, aún el de aquellos a quienes beneficia con el reparto de pesos y de cargos.

Hay varias opciones para elegir (Milei, Bullrich, Massa, Schiaretti y Bregman) de los cuales tres son los que tienen más opciones para ir a un balotaje, balotaje que no sabemos entre quiénes será dado que las encuestas no son confiables. El 22 de octubre debemos decidir en manos de quién queremos dejar nuestro futuro: 1) un trío en el gobierno que nos dejó aquí, al borde del precipicio 2) dar un salto al vacío desde el vacío en que ya estamos y 3) elegir a alguien que, con errores y aciertos, cuenta con un andamiaje sólido como para no ser volteado a los seis meses.

Desde 1983 TODOS los gobiernos que tuvimos han sido democráticos, es decir, electos por el voto popular en elecciones libres. Ninguno de los que nos gobernaron estos 40 años vinieron de otro planeta o nacieron de un repollo: los pusimos nosotros con el voto. Es hora de que el pueblo se haga cargo de los gobernantes que elige, no se trata de quejarse después con el “yo no lo voté”. Escuché de muchas personas que no irán a votar. Espero que, después, no sean las primeras en quejarse.

Que elijamos al mejor, o, mejor dicho, al menos malo de los candidatos, depende de todos nosotros. Pensemos mucho antes de meter el voto en la urna.

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